Por la doctora Mariela Jaén, miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología, directora de Jaén Dermatología & Estética.
Pasado el tiempo de las medias el calor pone en primer plano las piernas. Queda en evidencia el edema las varices y o arañitas. Es común que estos factores convivan en una mujer.
Es importante acudir a la consulta con el especialista para descartar posibles enfermedades asociadas y para iniciar un tratamiento adecuado a la medida de la necesidad.
Un ecodopler de piernas es un buen punto de partida. Ya sea para tratar las arañitas que son las afecciones más comunes o para las várices de menor o mayor calibre Conocer los tratamientos que se pueden realizar durante el verano y cuales reservar para épocas del año donde la radiación solar es más baja. Así no se correrá riesgo de quedar con manchas que luego serán muy difíciles de borrar.
Las piernas reciben el peso del cuerpo, por eso, la presión venosa es mayor allí que en el resto del cuerpo. Cuando la sangre se estanca en los miembros inferiores se genera la molesta sensación de piernas cansadas. Esto por lo general viene acompañado de calambres y adormecimiento, y a veces de edema de tobillos. También, puede ocasionar la dilatación de las venas superficiales que más tarde podrán convertirse en várices. Por lo general sucede por la tarde y al final del día. Se debe a la dificultad del retorno venoso de la sangre hacia el corazón, desde las piernas, después de haber estado sentada o parada durante muchas horas.
Existen distintos procedimientos que ayudan a combatir el edema de las piernas, los indica el médico y se realizan en gabinete.
Presoterapia: botas presoras que al inflarse y desinflarse en forma rítmica producen presión. Esto remueve el edema acumulado y acelera el retorno venoso y linfático.
Drenaje linfático manual: masaje que sigue la dirección de la circulación linfática. Dirige el exceso de líquido presente entre las células (edema) hacia los vasos linfáticos colectores principales para su drenaje final.
Electroestimulación con contractores: estimulación y relajación, que produce el efecto de gimnasia pasiva muscular. Aumenta el tono muscular y favorece la eliminación de líquido intersticial.
Para tratar várices y arañitas los láseres son una muy buena opción.
• Láser transdérmico: es ideal para borrar derrames y arañitas (telangiectasias). Se aplica con frío, es indoloro y rápido. Se puede realizar durante el verano sin riesgo de mancharse con el sol.
• AFT ( Advanced Fluorescent Technology ): es un láser que combina la fluorescencia con la luz natural del rayo láser; así, se potencia el efecto terapéutico. Corrige imperfecciones, como angiomas, derrames pequeños y arañitas. Combinado con el láser transdérmico, es muy efectivo para el tratamiento de las telangiectasias y varicosidades. Sólo se podrá permanecer al sol con bloqueadores o pantallas totales.
• Láser Nd-Yag 1064: este láser térmico se utiliza para telangiectasias y pequeñas várices con muy buenos resultados clínicos y mímino disconfort del paciente.
• Láser endoluminal: es la metodología para tratar várices de gran calibre, de color azul violáceo, que forman protuberancias en la piel. Se lo aplica en una cirugía mínimamente invasiva, que requiere menos anestesia local que la cirugía convencional. Se coloca una solución anestésica fría alrededor de la várice que hace que disminuya el dolor. Al finalizar la intervención se puede seguir con las tareas cotidianas. No es necesario usar vendaje elastocompresivo. Esta operación puede efectuarse durante el verano, pero está contraindicada la exposición solar, con lo que se aconseja realizarla durante otra estación.
Medicación
Existen venotónicos por vía oral que son buenos porque reducen los síntomas, a esto se suman las cremas aplicadas localmente.
Uso de cremas y exfoliantes
Las cremas ayudan a mejorar el aspecto general; entre otras se aconsejan las que tienen centella asiática, coffeberry, derivados de algas y hedera helix. Tanto cremas como geles se aplican con suaves masajes en forma circular durante 10 minutos.
Las exfoliaciones se pueden realizar dos o tres veces por semana, y luego realizar nutrición corporal con cremas en las zonas más secas y deshidratadas.
Cómo ayudan los ejercicios físicos
Son válidos los ejercicios que activan la circulación sanguínea, como caminar, subir escaleras, nadar, correr o bailar.
Es importante estar en movimiento, se aconsejan ejercicios de rotación y flexión de pies para evitar el problema,
Algunos consejos útiles.
• No estar de pie y sin moverse.
• No usar medias ajustadas en la pantorrilla.
• Usar calzado cómodo. • Caminar media hora por día.
• Usar tacos de dos a tres centímetros
• Levantar las pieceras de la cama, para tener los pies en alto y aprovechar este descanso durante la noche.