Por la Dra. Adriana Raimondi
La eliminación de los tatuajes con buen resultado cosmético ha sido una inquietud mantenida durante siglos.
En los últimos años, el número de personas tatuadas ha aumentado considerablemente. De la misma forma, también se ha incrementado el número de personas que optan por quitarlos.
En este terreno ocupa un lugar destacado el tratamiento con láser, ya que la amplia gama de colores presentes en los diseños modernos puede verse como un desafío para la eliminación con este método. Claro que habrá que tener en cuenta, que incluso, empleando el láser y la técnica adecuada, no se puede garantizar un resultado clínico excelente.
Qué motiva la realización del tatuaje
Los tatuajes son una antigua forma de arte cuyos orígenes se remontan hasta la Edad de Piedra (12.000 a. C.) y han mantenido su popularidad en diferentes continentes a través del tiempo y de diversas culturas. Los motivos que llevan a hacerse un tatuaje son muchos, pero, parece ser una causa importante la búsqueda de lograr obtener una identidad a una edad temprana. Diferentes civilizaciones han utilizado los tatuajes tanto con fines decorativos como con fines de identificación o marca de clases. Aunque la causa de muchos de ellos sólo la conoce el tatuado.
En los últimos años, el número de personas tatuadas ha aumentado considerablemente.
En los EE.UU, hasta el 24% de la población está tatuada, mientras que en países europeos como Alemania y el Reino Unido, entre el 9 y el 12%.
Tipos de tatuajes que se realizan
La técnica del tatuaje consiste en la inyección intradérmica de micropartículas de pigmento. Estas partículas pueden variar en tamaño, composición y profundidad dérmica.
La mayoría de los pigmentos del tatuaje no están aprobados por la (FDA) Food and Drug Administration y por lo general no está claro qué contienen las tintas que se utilizan para realizarlos. En general, se componen de compuestos inorgánicos y/o orgánicos, tales como cromo, mercurio, hierro, cobre, carbono y compuestos policíclicos.
Los tatuajes pueden dividirse en distintas categorías: profesionales, amateurs, cosméticos y traumáticos. Tatuajes profesionales, son los más comunes y se emplean en ellos una gran variedad de tintas o pigmentos de distintos tipos. Sales de metales, óxidos o complejos de pigmentos orgánicos que son absorbidos por las células fagocitarias.
Tatuajes amateurs, están realizados con pigmentos a base de tinta china, carbón o ceniza. Es muy raro ver colores distintos del negro en estos tatuajes ya que están hechos de tinta orgánica y tienden a ser más fáciles de eliminar.
Tatuajes cosméticos, son cada vez más populares en los últimos años. Se los emplea para mejorar la apariencia física de las personas (como maquillaje permanente; para mejorar las cejas, los labios y los ojos). Sin embargo, en los pigmentos que se utilizan en este tipo de tatuajes puede haber óxido de titanio y/o óxido de hierro, que pueden sufrir un proceso de oxidación y oscurecerse tomando un color gris o negro.
Tatuajes traumáticos, también llamados tatuajes naturales por ser resultado de explosiones o accidentes.
Técnicas de eliminación de tatuajes
La eliminación de tatuajes puede intentarse o lograrse mediante una gran variedad de procedimientos, algunos de los cuales pueden ser dolorosos, costosos y con efectos adversos.
Si bien los método pueden ser varios; salabrasión, dermoabrasión, destrucción química o térmica. La eliminación con láser es la más efectiva en la actualidad.
Un poco de historia la efectividad de los láseres en tatuajes
La eliminación de tatuajes con láser de CO2 se ensayó y publicó en los inicios de los 70. Actúa por la vaporización progresiva del tejido donde se ha depositado el pigmento. Pero, en muchos casos, el pigmento del tatuaje se halla ubicado en distintos niveles de profundidad en la dermis, esto ocasiona una vaporización de irregular profundidad y la eliminación incompleta del pigmento.
El láser de dióxido de carbono puede ser especialmente útil para la eliminación de tatuajes cosméticos en la cara (contorno de labios, perfilado de cejas). Sin embargo no es conveniente aplicarlo en otras áreas corporales o para los tatuajes grandes y extensos ya que puede dar como resultado la eliminación incompleta del pigmento y la posible formación de cicatrices
Uso del láser Q-switched
La aplicación de fototermólisis selectiva o el proceso de producir daño selectivo permite la eliminación de los pigmentos que componen el tatuaje sin afectar los tejidos circundantes. El principio de la fototermolisis selectiva propuesto por Anderson y Parrish en 1983 revolucionó el tratamiento de los tatuajes.
Los láseres de Q-Switched alejandrita (755nm), Q-Switched Nd: YAG (532 / 1064 nm) y Q-Switched rubí (694nm), cumplen con los requisitos de fototermólisis selectiva. Por este motivo todas estas longitudes de onda son eficaces para destruir el pigmento del tatuaje sin lesionar las estructuras vecinas. Así se pueden obtener excelentes resultados estéticos. Es posible tratar pigmentos oscuros. Además, también se pueden eliminar los pigmentos rojo, amarillo y naranja.
El más utilizado en la actualidad es el Q-Switched Nd: YAG Este tipo de láser se propuso para la eliminación de tatuajes puesto que su longitud de onda mayor (1064nm), penetra más en la dermis (en la melanina), lo que resulta útil para la eliminación de pigmentos depositados a más profundidad y evita cambios de la pigmentación.
Nuevas tintas utilizadas mejoran las propiedades ópticas de la piel Se están desarrollando nuevas tintas de tatuaje con el objetivo de que puedan eliminarse más fácil de la piel cuándo se lo desee. En EE.UU, está disponible desde 2009 una nueva tinta de tatuaje constituida por microesferas encapsuladas de pigmentos bioreabsorbibles.
Asesoramineto: Dra. Adriana Raimondi, dermatóloga, miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología, miembro de American Academy of Dermatology, directora de D&ME.