Por la Dra. Karina Nadur, miembro de la sociedad Argentina de Dermatología, Directora Médica del Centro ND Skin, Dermatología Clínica y Estética.
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La hiperpigmentación o manchas de la piel son causada por el aumento de melanina.
Para saber un poco más
La melanina es producida por los melanocitos. Es el pigmento responsable del color de los ojos, la piel y el pelo. La hiperpigmentación puede ser causada por el daño solar, medicaciones, infecciones, traumatismos y enfermedades inflamatorias, como por ejemplo el acné.
Las personas con fototipos más oscuros, son más propensas a mancharse, especialmente si tienen exceso de exposición al sol.
Distintas formas de hiperpigmentación.
Puede ser difusa o focal, afectando principalmente áreas con mayor exposición al sol como la cara, pecho y dorso de manos.
La hiperpigmentación se asocia con distintas enfermedades por este motivo siempre es indispensable realizar la consulta con el dermatólogo.
Una forma de hiperpigmentación es el melasma, también conocido como cloasma. Se trata del oscurecimiento irregular en zona de la cara, que a menudo se da en mujeres embarazadas, por ingesta de anticonceptivos y antiepilépticos, disfunción tiroidea leve.
La exposición al sol intensifica las lesiones. Ciertas medicaciones como el diazepam, clonazepam, metotrexate, metoclopramida, amiodarona, minociclina, bleomicina y el cisplatino pueden ocasionar manchas si no se utilizan las precauciones necesarias para su uso, en especial es indispensable no exponerse al sol.
Tratamiento
El tratamiento de la hiperpigmentación puede incluir principios activos como la hidroquinona, ácido kójico, ácidos alfa hidroxi, ácido azelaico, ácido ascórbico, la tretinoína, los glucocorticoides tópicos, y el extracto de regaliz.
Otra opción es realizar peelings.
La palabra peeling significa descamación o expoliación y consiste en la utilización de diferentes sustancias químicas (TCA, mandélico, glicólico, acido retinoico, entre otros) o bien, físicos (punta de diamante) sobre la piel para renovar las capas mas superficiales de la epidermis pudiendo así eliminar imperfecciones mejorando el tomo y textura de la piel. La periodicidad del tratamiento depende del daño de la piel y el ácido ha utilizar.
Uso de aparatología de última generación
Luz pulsada con tecnología AFT (Advanced Fluorescense Technology) es la nueva generación de tecnología de luz pulsada. Su diseño innovador convierte la luz UV no utilizada en el espectro óptimo para cada aplicación. La exclusiva forma de cada pulso de AFT limita la potencia máxima al rango terapéutico, que calienta en forma precisa el objetivo previsto ocasionando muy poco o ningún daño a la piel ni molestias. Se necesitan entre 2 y 3 sesiones con intervalos de 1 mes. Estos tratamientos se deben dejar para el periodo que va de marzo a octubre cuando la radiación solar no es tan fuerte.